Napoleón: Amor y Guerra a partes iguales:
Sé que llevo mucho sin
pasarme por estos lares. Y es que si os soy sinceros cada vez tengo menos
tiempo para ponerme a escribir. Nuevamente me encuentro en un momento saturado,
no por temas personales, si no por temas de la carrera que me hace cada vez tener
menos tiempo para escribir como hacer algún que otro vídeo en mi canal de YouTube,
el cual os aliento a echar un vistacito y a suscribiros (que es gratis y así me
ayudáis con el feedback).
Sea como sea, el destino o,
mejor dicho, el cine nos vuelve a reunir. Sé que debería haber realizado el
especial del “Mes del Terror” y haber reseñado alguna que otra buena cinta,
pero como escribo párrafos más arriba las circunstancias me han sido
imposibles. No obstante, como os iba diciendo me vuelvo a poner a escribir ya
no solo por necesidad (dicen que todo escritor necesita escribir constantemente
en la vida), sino porque deseo hablaros de esa cosa que tanto me fascina y que,
sin embargo, no pudo hablaros en mi canal de YouTube (al menos directamente):
¡La Historia!
Y es que está vez nos marchamos a 1793 al país vecino, Francia, para degustar una de las obras del séptimo arte que, a pesar del cumulo de críticas negativas que está recibiendo siendo la “decepción” del año, nos habla de uno de los personajes históricos que más fascina a la gente y a la humanidad en general y que el mismo paso del tiempo a colocado a la par de estrategas como lo fueron Julio César (muy vivo gracias a las obras de Santiago Posteguillo) o Alejandro Magno.
En efecto, como
sabéis os hablo de Napoleón Bonaparte nacido en Ajaccio, Córcega, el 15 de
agosto de 1769 y quien durante doce años llevo a Europa a enfrentarse entre
ella durante el periodo histórico conocido como “Guerras Napoleónicas”, las
cuales, dicho sea de paso, se iniciaron mucho antes de que Napoleón fuera
altamente conocido por la sociedad francesa y llegará hasta proclamarse el
Imperio Napoleónico el cual gobernó y expandió invadiendo, entre otras naciones
ya extintas, la patria España en la que fue uno de los actos de lucha más heroicos
de los españoles: La Guerra de Independencia.
Si bien no es una clase
de historia lo que quiero realizar en esta reseña tengo que poner, como
coloquialmente se dice, algunos puntos sobre las íes, y es que para empezar
algo de contexto.
Como antes he dicho nos
encontramos en 1793, la cinta inicia con la ejecución de una de las mujeres
que, a la postre, ha sido burdamente difamada pero que, gracias a la
historiografía más moderna ha sido rescatada y limpiada de la morralla que se
le atribuyo. La hermosa Marie Antonieta, esposa de Luis XVI de Francia. Y es
que en ese año el que se conocería como “El Terror” liderado por figuras como
Maximilien Robespierre (Arrás, Reino de Francia, 6 de mayo de 1758-París,
República Francesa, 28 de julio de 1794), Georges-Jacques Dantón
(Arcis-sur-Aube, Reino de Francia, 26 de octubre de 1759-París, Primera
República, 5 de abril de 1794), héroe del 10 de agosto quien sería guillotinado
posteriormente en el comité de salud pública que lidero la primera república
francesa durante este periodo, el bello Saint-Just “El Ángel del Terror”,
(Decize, Reino de Francia, 25 de agosto de 1767-París, Primera República, 28 de
julio de 1794) o Jean Paul Marat (a quien apodo cariñosamente el “Goebbels”
francés), (Boudry, Suiza, 24 de mayo de 1743-París, Primera República, 13 de
julio de 1793), se pasaron de rosca guillotinando a cualquier “reaccionario”
que deseara detener el avance de la revolución alimentada por las ideas
ilustradas de gentes como John Locke (padre del liberalismo económico y
político) o Rousseau y su contrato social el cual sirvió como base a los
“Derechos del Hombre y del Ciudadano” (en francés: Déclaration des Droits de l´home et du Citoyen) que los mismos
revolucionarios (los jacobinos, es decir, el ala izquierda de los que se
sentaban en el Parlamento francés) no dudaron de saltarse cuando lo vieron
oportuno.
Sin saber mucho del
periodo (yo tampoco soy un experto, aunque me fascina saber más y más de este
periodo) podéis haceros una idea de lo que fue. Ejecuciones a mansalva,
conspiraciones políticas, una guerra de por medio (la que los propios
revolucionarios declararon a las potencias del Antiguo Régimen, en concreto a
Austria) y el advenimiento y caída del que en mi opinión es el primer dictador
del mundo moderno y de la historia: el antes citado Robespierre. Quien fue detenido la noche
del 27 de julio de 1794 (o para la época, porque también se cambió, entre
muchas cosas, el calendario francés: 9 de termidor) y guillotinado junto sus
colaboradores al día siguiente.
Ya hecho este pequeño repaso por la historia de la Francia de la época (la cual vemos de manera muy escueta) os preguntaréis, "vale Novel, ¿Pero de qué va esto?, ¿De qué o, mejor dicho, DE QUIÉN nos habla la película?"
Pues bien, la película en si podría decirse que es un biopic, es decir, una biografía hecha película, de Napoleón Bonaparte (quien es interpretado por el galardonado actor y excepcional; Joaquín Phoenix), militar, estratega y político de origen corso (su familia luchó por la independencia de la isla en la que nació tanto el cómo sus hermanos) que destaco por su excelsa carrera en Francia y quien, como se ve en la película, llegaría a ser el hombre que acabaría matando a la misma revolución. Y es que Bonaparte, si por algo es conocido, es por coronarse a sí mismo como el “Emperador” de los franceses, marcándose un Augusto que da gusto (disculpad el pareado) y que extirpo del imaginario francés (por unos años) las ideas de: igualdad, libertad y fraternidad que la revolución trajo al mundo.
Y es que, además la cinta sobresale por sobre todo ser una cinta bélica que no se corta ni un pelo (y fijaros que me he visto películas bélicas, como 1917, la cual le dedicaré una entrada en el futuro) y es que entre las grandes batallas que nos muestra la cinta dirigida por uno de los titanes y maestros del cine, Ridley Scott (South Shields, Reino Unido, 30 de noviembre de 1937), creador de la también fenomenal “Gladiator” a la cual guardo una relación sumamente especial, podemos ver, por mencionarlas: Austerlitz, Tolón (que fue la primera batalla por la que Napoleón destaco por ser un gran estratega), la fallida invasión a Rusia (que Hitler repetiría tan solo 179 años después que el corso) o Waterloo, la cual fue la batalla que sentenció a Napoleón a pasar el resto de su vida en el exilio en la Isla de Santa Elena, donde acabaría falleciendo un 5 de mayo de 1821 debido a un cáncer estomacal (aunque muchos dicen que pudo ser envenenado lentamente).
Habiéndoos dicho esto
mucho diréis: "Joder, Novel, pinta de maravilla." Y es que al menos a mí sí que
me ha gustado la cinta a pesar de que, como toda obra de ficción, tiene sus
añadiduras.
Sin embargo, por lo que parece el gran público opina todo lo contraria, ya que en muchas páginas webs y canales de internet muchos la han acuñado como el “Napomojón” o “Bodrio del año”. Y es que, permítaseme decir que, aunque es verdad que tiene sus licencias y muestra bastante poco (por ejemplo, no se habla en ningún momento de la Guerra de Independencia que fue la primera derrota de Napoleón en la Batalla de Bailén) la cinta es sumamente disfrutable y como todo drama histórico no escatima en violencia y en escenas dramáticas plasmadas, como antes he dicho, en la relación entre Josefina y el emperador de los franceses.
- El Novel Eterno, 3 de diciembre de 2023.